Reparación de chapa y pintura, ¿algo complicado? Quizás no tanto.
Si has tenido un golpe o quieres darle un cambio de aires al color de tu vehículo y has intentado pedir precio, probablemente te hayas dado cuenta de lo dispares que son todas las cotizaciones recibidas.
En este post, tratamos de darte algunos consejos a la hora de elegir al mejor taller o profesional y te explicamos las opciones que hay que pueden justificar las grandes diferencias de precio.
Reparación de chapa y pintura: Diferencias tecnológicas y de procesos en la pintura
Hasta hace no mucho, los trabajos de chapistería eran muy manuales y requerían una gran atención y tiempo. La experiencia y la destreza del profesional eran las claves de un buen trabajo, casi tanto o más que el material.
Aunque hay aún profesionales que utilizan dichos métodos más tradicionales, cada vez existen más talleres especializados en chapa y pintura con toda clase de máquinas de alta precisión. Son, en general, más rápidos, más eficaces y los resultados tienden a ser mejores.
Así que primer consejo: lo barato sale caro. Una vez hayas encontrado varios precios (nuestra recomendación es obtener al menos tres), busca las opiniones y recomendaciones de otros clientes y préstales atención. Como sabes, aquí, Camarounds puede ayudarte con este proceso.
Recuerda que un mal trabajo te dejará insatisfecho, habrás gastado mucho dinero para un resultado que no era el esperado. Antes de decidirte, es bueno también preguntar por los medios de los que dispone el profesional. Como explicamos abajo, sus medios determinan qué tipo de pinturas y acabados puedes realizar.
¿Es mejor desmontar y pintar el vehículo por piezas?
Si estás buscando un cambio total de imagen en tu carro o bien un repintado completo tras un pequeño accidente, te recomendamos desmontar y “pintar por piezas”. Es decir, que se desmonte todo lo que se pueda de la carrocería para que el trabajo pueda realizarse, pieza a pieza, en las mejores condiciones y de manera minuciosa. Sólo así se asegura un correcto acabado en el pintado. Además, el desmontado hace más sencillo el corregir las abolladuras y arañazos que pueda tener tu chapa. Si tienes que pintar un par de piezas o más, a causa de un accidente, los profesionales te van a recomendar un pintado completo del vehículo para evitar que “parezcan de un color distinto”.
Lógicamente hay ciertos elementos que no son necesarios desmontar, bien porque llevaría mucho tiempo o bien porque un buen empapelado puede ser suficiente.
Desmontar lleva más tiempo y es más caro. Sin embargo, recuerda, lo peor que nos puede pasar al final del proceso es mirar con detenimiento y ver un montón de imperfecciones como burbujas, esquinas mal pintadas, etc.
Atención a los “básicos” de la chapa y pintura
Observa bien la carrocería. Si hay aún alguna abolladura o arañazo, por favor, conversa con el profesional y asegúrate que se corrigen. Ya que vas a gastar dinero en el pintado, quieres que quede perfecto. Esto no ocurrirá si tienes desperfectos mal arreglados.
El lijado. Esta fase es fundamental. Si no se hace bien, la pintura no se adherirá correctamente, aparecerá con imperfecciones y terminará descascarillándose con el sol al poco tiempo.
La imprimación, la primera capa (de fondo o de aislamiento) y el acabado. Estos son los pasos fundamentales.
- La imprimación consigue por un lado que no se noten las reparaciones hechas previamente; y por el otro lado, evita que la chapa se oxide.
- La primera capa de pintura o de fondo, además de darle el color deseado, debe ser de suficiente calidad para asegurar la adherencia del acabado, la laca o el barniz.
- La pintura de acabado da el efecto final a la pintura, además de proteger contra el sol, arañazos, lluvia, lodo, etc.
La calidad de estos elementos es fundamental. Muchas de las diferencias de precios que obtendrás vendrá de la calidad de los productos utilizados. Por ejemplo, unos productos requieren maquinaria específica y mucho más tiempo de preparación y secado que otros. Pregunta y consulta con el profesional.
Tipos de acabados
Tres son los más habituales: acabado de pintura monocapa, acabado de pintura bicapa y acabado de pintura tricapa.
En el acabado de pintura monocapa, protección y color van en el mismo producto. Por esta razón, es el más rápido y económico, aunque de menor durabilidad. Tiene menos resistencia química y una variedad de colores más reducida. Además, efectos como el metalizado o el perlado no pueden lograrse con este acabado. De todas formas, pueden añadirse resinas y pigmentos para mejorar la apariencia final.
La pintura bicapa es probablemente la más utilizada. Dicho acabado se compone de una primera base que aporta color y efectos y una segunda (el barniz o laca) que aporta el brillo y protege de los elementos. Este acabado es muy versátil, suele ser bastante rápido y consigue gran cantidad de efectos visuales y colores, incluyendo el metalizado y el perlado. Este último efecto es el más complejo, pero es que más pigmentos permite. Es pues, en general, más caro que el simple metalizado.
La pintura tricapa prácticamente sólo se utiliza en coches de alta gama. Consiste en una primera capa de base, otra traslúcida que refleja la capa de base, con una final de laca o barniz. Evidentemente, es mucho más cara que las anteriores.
Conclusión
Ahora que conoces el lenguaje de la chapa y pintura y qué es lo que puede determinar los precios de estas reparaciones. Con Camarounds, podrás describir tu problema, recibir cotizaciones, prácticamente, al instante, hablar con los profesionales, comparar y contratar. Todo al alcance de tu mano de la forma más eficiente.
¡Suerte!
